Alberto Sanabria
En el histórico pueblo de Cumanacoa, el San
Baltasar de los Arias de la época colonial, nació el día 1 de noviembre de
1811, don José Antonio Ramos.
Fueron los padres de don José Antonio Ramos, el
Comandante Miguel Ramos y la señora María Josefa González Velásquez. Su padre
murió en la sangrienta batalla de Urica, tan recordada en nuestra historia, y
donde sucumbió el valiente y feroz Boves.
Con motivo de la muerte de su esposo, la madre de
don José Antonio Ramos se trasladó a Cumaná, llevando a su hijo a educarse en
dicha ciudad. Comenzó a estudiar latinidad en Cumaná y continuó en Caracas,
donde cursó también Filosofía, pero tuvo que regresar a Cumaná, para continuar
sus estudios.
En 1826 entró don José Antonio Ramos como
meritorio en la Administración de la Renta del Tabaco del Departamento Orinoco;
sirviendo luego un cargo en la Intendencia Departamental. Fue amanuense del
Escribano don Pedro Rojas Casanova, desde 1827 hasta 1830; cuando se trasladó
nuevamente a Caracas, para seguir estudios, y a la vez desempeñar un puesto en
la Contaduría General de la Renta del Tabaco y en la Secretaría de Hacienda y
de Relaciones Exteriores, habiendo regresado a la ciudad de Cumaná, donde se
consagró al foro y a la educación de la juventud.
En el mes de enero de 1832 se estableció en
Cumaná la clase de Gramática Latina, dispuesta por el Vicepresidente de la
República, doctor Diego Bautista Urbaneja, Encargado del Poder Ejecutivo, y
dicha clase fue regentada por don José Antonio Ramos, contándose entre sus
alumnos los distinguidos jóvenes cumaneses Pedro José Rojas, Andrés Antonio
López, José María Sucre Márquez, José Silverio González, Pedro Carmen Rojas,
José Manuel Grau y Félix Melchor Centeno. Esta importante clase fue precursora
del histórico Colegio Nacional d Cumaná, cuya fundación ocurrió el día 21 de
diciembre de 1834.
Otros cargos que ocupó don José Antonio Ramos,
fueron los de secretario de la Diputación Provincial, Juez del Tribunal de
Primera Instancia, Presidente de la Corte Suprema, miembro de la Diputación
Provincial y de la Asamblea Constituyente del Estado Nueva Andalucía, que
formaron los actuales Estados Sucre y Monagas; Senador al Congreso Nacional;
Secretario y Gobernador de la Provincia de Cumaná, así como también la
Presidencia del Estado del mismo nombre. Habiendo sido llamado a encargarse de
la Presidencia del Estado Bermúdez, en su carácter de segundo designado, lo
sorprendió la muerte el día 11 de octubre de 1881. Muchos otros cargos
nacionales, estatales y municipales desempeñaron en diversas épocas don José
Antonio Ramos en su región nativa, y hombre versado en leyes se consagró
durante largos años al ejercicio de la jurisprudencia.
Aparte de los numerosos cargos públicos que
desempeñó don José Antonio Ramos, no podemos olvidar su destacada actuación en
pro de la instrucción pública, pues fue de los más importantes catedráticos del
Colegio Nacional de Cumaná y de otros institutos de enseñanza, contribuyendo al
mejoramiento de la juventud en épocas de pobreza y de calamidades públicas.
Entre los hijos de don José Antonio Ramos,
figura el recordado sacerdote Presbítero doctor José Antonio Ramos Martínez,
honra del clero venezolano y brillante historiador; así como también sus
hermanos don Jerónimo y don Miguel Ramos, quienes fueron hombres de letras y destacados
educadores. Era nieto de don José Antonio Ramos, el doctor José Antonio Ramos
Sucre, sabio humanista, de poderosa y rara mentalidad, consumado políglota y
filosófico escritor, muerto en plena juventud en la ciudad de Ginebra, donde
desempeñaba el cargo de Cónsul General de Venezuela.
Hemos querido recordar hoy a un ilustre
venezolano, que tuvo señalada actuación en la instrucción pública, en la
administración y en otras actividades, y cuya vida estuvo consagrada a toda
manifestación cultural en bien de su región nativa.
Fuente: Cumaneses
ilustres. Alberto Sanabria.
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